Las temperaturas del suelo desempeñan un papel fundamental en el desarrollo y rendimiento de las cosechas. Influye desde la germinación de las semillas hasta la madurez del cultivo. Los cambios de temperatura en el suelo pueden afectar la disponibilidad de nutrientes, la actividad de los microorganismos beneficiosos, la absorción de agua y la actividad enzimática en las raíces de las plantas.
Por tanto, es esencial para los agricultores entender cómo influyen las temperaturas del suelo en las cosechas, así como para los ingenieros agrónomos y científicos que buscan optimizar la producción agrícola. Desde Rinoagro, como expertos en la venta de productos agrícolas, te contamos en este artículo qué condiciona la temperatura del suelo y su impacto en las cosechas.
¿Qué condiciona la temperatura del suelo?
La temperatura del suelo está condicionada por diversos factores que pueden ser tanto factores abióticos (es decir, componentes físicos y químicos no vivos del ecosistema), como factores bióticos (componentes vivos del ecosistema).
- Radiación solar. La cantidad de radiación solar que llega a la superficie del suelo afecta directamente su temperatura. La luz solar calienta el suelo durante el día y, en menor medida, durante la noche.
- Vegetación. Las plantas proporcionan sombra y evapotranspiración, lo que reduce la temperatura del suelo en comparación con áreas desnudas o con poca vegetación.
- Topografía. La forma del terreno afecta a la temperatura del suelo. Las áreas inclinadas reciben más radiación solar directa y, por lo tanto, tener temperaturas más altas, mientras que las áreas con orientación norte tienen temperaturas más frescas.
- Las propiedades físicas y químicas del suelo, como la textura (por ejemplo, arena, limo, arcilla) y la composición (presencia de materia orgánica, minerales), influyen en su capacidad para retener el calor. Los suelos más oscuros tienden a absorber más calor que los suelos más claros.
- Humedad. La cantidad de agua presente en el suelo también afecta su temperatura. El agua tiene una capacidad térmica alta, lo que significa que puede almacenar y liberar calor lentamente. Los suelos húmedos tienden a tener temperaturas más frescas, ya que el agua evapora y absorbe el calor en el proceso.
¿Cómo afecta las temperaturas del suelo a las cosechas y desarrollo de plantas?
La temperatura del suelo afecta al desarrollo de las cosechas. Algunas formasen las que las temperaturas del suelo influyen en las plantas:
- La temperatura del suelo es un factor clave para la germinación de las semillas. Cada especie de planta tiene requerimientos específicos de temperatura para su germinación óptima. Si la temperatura del suelo es demasiado baja o alta, puede afectar negativamente el proceso de germinación e incluso provocar la muerte de las semillas.
- Un suelo frío puede retrasar el crecimiento de las raíces, lo que a su vez limita la absorción de agua y nutrientes esenciales. Esto afecta negativamente el desarrollo general de la planta y su capacidad para obtener los recursos necesarios para su crecimiento saludable.
- La disponibilidad de nutrientes en el suelo está estrechamente relacionada con la temperatura. Las temperaturas del suelo afectan la actividad de los microorganismos y las reacciones químicas que liberan los nutrientes del suelo, haciéndolos disponibles para las plantas. Si la temperatura es demasiado baja, la actividad microbiana disminuye, lo que afecta la disponibilidad de nutrientes esenciales para el crecimiento de las plantas.
- Las temperaturas del suelo afecta al crecimiento del tallo, las hojas y la floración. Por ejemplo, las altas temperaturas pueden causar daños en el tejido vegetal, reducir la fotosíntesis y disminuir la producción de biomasa.
- Cada cultivo tiene requerimientos específicos de temperatura para alcanzar la madurez óptima. Si las temperaturas son inadecuadas, pueden acelerar o retrasar la madurez de los cultivos, lo que puede tener consecuencias en la calidad y cantidad de la cosecha.
Hay diversos métodos para medir la temperatura del suelo. En la actualidad, gracias al avance tecnológico, los agricultores y científicos lo tienen más fácil, gracias a herramientas como el uso de termómetros de contacto, termopares, sensores de temperatura en línea y tecnologías más avanzadas como la teledetección y los sistemas de monitoreo remoto.
